domingo, 22 de agosto de 2010

UNA BELLA ETAPA


Deseo empezar a desarrollar ésta crónica como una lección de vida, como un mensaje a la vez homenaje a todas las personas que se interesen en leer, la presente aun cuando la vida de particulares poco de atractivo tuvieran, pero como experiencia y lecciones pueden ser ilustrativas y penetrar en su mundo desconocido, soy Carlos Aguirre García mi infancia fue como el común de los niños de los cincuenta. Pero algo particular marcó mi vida al recorrer sin proponérmelo pueblos diversos y convivir con sus usos, costumbres, afectos, folclor, habla, y meterme en el corazón de cada pueblo donde viví parte de mi infancia y que definitivamente marcara mi personalidad, fui mariatanino, anchucaino, tantarán chino, quinteño, sandamianino, Huarochirano llambillano. Como explico? Mi madre fue profesora de ésa época heroica y sacrificada donde cada pueblo apoyaba a su maestra o maestro con sus pocos recursos pero con mucho cariño, el maestro ere el verdadero líder o lideresa de cada pueblo, cada maestro o maestra así le llamaban, inspiraba respeto por su comportamiento y su dedicación exclusiva sus buenos hábitos y su entrega a la causa de la educación, su puntualidad no digo que ahora no hayan maestros de ésa calidad pero quizá todo tiempo pasado fue mejor en algunas cosas puntuales. Testigo fui por años de ése afecto ganado a base de trabajo y de serias necesidades que hoy la modernidad las ha superado pero también aparecieron otros malos hábitos he ahí la dicotomía para muchos quienes tuvieron mejores maestros los de antes o los de ahora. Cuales las diferencias entre la educación de antes o la de ahora.

















Yo recuerdo mucho a mis maestros, a todos, pero no por igual los recuerdo hoy con gratitud, en aquel momento con miedo o temor, especialmente aquel maestro o maestros que con energía y palmeta o correa me obligó aprender algo que creía saber pero que no sabía, aquel maestro que premiaba con buenas notas a los que nos aplicaba el castigo físico para que aprendiéramos bien la clase, santo remedio dirían las abuelitas para nunca dejar de estudiar bien. Clase dictada, clase aprendida hoy eso ha cambiado si el maestro toca al alumno puede ir hasta preso cosas de la modernidad de la pedagogía contemporánea.
Y en lo pueblos mencionados carecían de comodidades y servicios básicos hoy bellas anécdotas que vamos a relatar mas adelante como hacíamos fácil y feliz nuestra estancia en aquellos pueblos. siempre ligados a la educación ésa era la razón de mi permanencia junto a la autora de mis días.
SANTIAGO DE ANCHUCAYA allí desperté a la vida allí recibí el calor y el cariño del pueblo, su falta de comodidades la compensaban los pobladores con mucho amor y cariño y obediencia y compañía por su maestra yo gozaba de ese afecto por ser el hijo de la maestra, vivienda nos brindaban, alimentos nos regalaban, pellejos limpios para dormir compañía de las alumnas atención de los padres, papa, queso, charqui, oca, Masagua, cahue, leche fresca de cabra o de vaca eran una especie de ofrendas para su maestra, un mal desconocido en los ojos hacía triste a veces mi vida, pero tenía el calor de mamá buena y el cariño de todos.

Los amiguitos de edad me llevaban a sus casas almorzar sin que sepa mamá, ellos se quedaban solos para la escuela sus padres se iban a la chacra, volteábamos con Josué mi amiguito, un cajón que hacía de mesa, sobre él vaciaba una olla de papas, ocas, calientitas tapadas con mantas que su madre le había preparado, nos sentábamos en unos tronquitos pequeños y sobre unos pellejitos suaves y bellos y a comer se ha dicho junto a el patache o la sopa, el infaltable queso o el charqui bien chancado, a veces cantando el tuquito. Anacleta se llamaba la mamá de Josué, la buena mujer tenía sus cabras de donde me regalaba leche para combatir la tos, leche de cabra para la tos del Carlitos decía. Viví igual en la casa de los Saavedra, Lorenzo y Ricardo jóvenes músicos y su mamá Braulia nos acogieron en su morada era el engreído de casa pues todos eran mayores gratos recuerdos de éstos dos hermanos y su madre que tantas atenciones tuvieron conmigo y mi madre. Gratos recuerdos de don Bernardino Pomajulca su esposa María y su loro travieso que remedaba cada palabra mía, seco me tenía el loro hasta mi plato de comida me lo premió, pásame esa piedra me dijo un día en buen Bernardino en el patio grande de su bella casa fui por la piedra y ésta caminaba lentamente quedé estupefacto como una piedra se movía sola y tenía patitas.












Allí conocí a la tortuga, trae un toro pedía para comer con Carlitos decía y traía un enorme y fresco queso para degustarlo con papas de ésas que ya no produce la mas hermosa tierra de cultivo en la zona sur de Huarochirí. Que bellos y felices momentos en Anchucaya, los sábados viajábamos a Huarochirí por provisiones lunes de madrugada estábamos de vuelta, no teníamos reloj solo el cálculo de la hora alguna vez falló, me levantaba a la orden de mamá me ponía una bayeta a mi espalda y sobre ella mi ponchito, mi sombrerito y a caminar en la oscuridad rumbo a nuestro trabajo Anchucaya era el destino, Killuma es un lugar por donde había que pasar lugar donde algunos jinetes cayeron y perdieron la vida en distintas épocas y circunstancias, era de noche sentía un tropel de caballos que ya nos alcanzaban, volteaba a y nada era oscuro, varias veces sentí lo mismo pero no tenía miedo mamá llevaba un balde de metal en la mano y me decía es el sonido del balde, mentira era tropel de caballos yo los escuchaba, había calculado mal la hora mi madre todavía no era madrugada, sino de noche estábamos pasando por el lugar donde dicen penan y esa era la explicación. Caminamos unos minutos mas y subimos a una chacra cualquiera, nos cobijamos bajo unas ramas y pasamos la noche allí era el deber y la obligación de nunca llegar tarde al trabajo. Eso me marcó, soy un fanático de la puntualidad y de la palabra empeñada otra madrugada camino a Anchucaya en el gran y caudaloso canal de kollpa caí por no dejar caer un enorme y agradable membrillo que mi tía Julia me regaló desde Lima, ropa mojada, frío serrano, tiritaba pero había que llegar al trabajo. Cuando los fines son nobles no se cuentan los medios El trabajo mas que una obligación es una devoción. Anchucaya y sus músicos los padres de familia ver a sus niñas a bailar para las actuaciones cívicas voluntariamente sacaban sus instrumentos y aparecía la orquesta sin mas pago que la gratitud, la satisfacción y empeño de su maestra grande Anchucaya grande su gente serán los mismos? los tiempos cambian yo prefiero quedarme con ésa imagen y ese bello recuerdo.

SAN JUAN DE TANTARANCHE hizo que las obligaciones y el deber por cumplir a mi madre la trasladen a otra hermosa y hospitalaria ciudad hoy moderna ayer con limitaciones pero grande en su amor por los foráneos, en especial por su maestros yo me sentía así

BELLOS RECUERDOS

LOS SUEÑOS siempre sueño como es normal en todos, pero los sueños con mi madre son siempre premoniciones o avisos de algún peligro, como si mi difunta mamá me avisa o me llama la atención, enfermedades de mis hijos, peligros de los mismos, accidentes, robos, siempre me alcanza un aviso vestido de algún sueño revelador que coincide con los hechos reales será que mi madre quería mucho a mis hijos Carlos, Martín, Juan Carlos. Yo la recuerdo mucho, falta me hace en ésta soledad, desde que partió a la eternidad de luto está mi corazón como quisiera que regresen los años de feliz convivencia su sola presencia era todo para mí. He aquí algunas letras hechas con devoción y sentimiento:

A LOS SEIS MESES DE TU PARTIDA
Sabes madre, ayer volví a nuestra casita
Donde vivimos alegrías y tristezas,
Frío esta el fogón y el poyo donde
Solíamos sentarnos, de luto entero el menaje
Triste los balcones y el corredor y el patio,
No hay rincón ni cosa que no tenga de tus manos,
De tu aroma, de tu afecto, de tu voz, de tu imagen.

Sabes que hasta te buscado entre mantas, pañolones
Calas mantas, sombreros y tantas cosas de tu afán,
Hechas de tus manos de seda artística, hoy tu recuerdo

Mamita, mi bella madre ahora que no sientes
Ni frío ni calor por que estás con Dios; guíame
Bendice el camino por donde transito rumbo al
Lugar donde tú me esperas para juntos ser eternos.









A UN AÑO DE TU PARTIDA

Ha transcurrido un año desde que con
Dios compartes su gloria; y yo me quedé
Con el recuerdo de tu cabecita de plata,
Tu dulce mirada, tus ligeros pasos tu gran amor.

En nuestra casita, allá donde compartíamos
Penas y sonrisas, donde vivimos necesidades
Y preocupaciones, todo sigue igual de cuando
Partiste sin retorno, frío el fogón que atizabas
Con tus manos llenas de amor.

Hasta el camino que a diario recorrías
Ha sido regado con lágrimas de tu ausencia,
He podido verte entre blancuras de manteles
Entre tejidos de tus manos, o puesto tu sombrero
O envuelta en una manta colorida, con prendedor
De plata o hilando en púdica con maestría.

Y aunque en éste mundo ya no estés presente
Por mandato de la vida; recibo siempre
Tus bendiciones, por que para mí; vives en
Mi mente y corazón eternamente.
























A veces tengo una necesidad irrefrenable escribir, las palabras brotan cual manantial inagotable, podría escribir las mejores composiciones en verso o prosa me sucede en horas impensadas a la medianoche, de madrugada o en la soledad de mis cavilaciones, la añoranza de la infancia, de adolescencia del ser amado, de la quimera, del amor perdido, de las oportunidades idas, de la vida por la vida quien no ha tenido un sueño, o una frustración que deja su marca.

UN CANTO A ALA AÑORANZA
Campanas sonoras de mi Huarochir
Con tus sonidos largos marcas las horas;
Con su velo y rosario en mano,
Mi madre acude a tu llamado a orar
Por la salud, por la vida, por el tiempo

Campiña verde de mi Huarochir,
Por tus caminos hechos al andar
Recorrió mis pasos de infancia de
La mano de mamá; que felicidad

Tierra fértil de mi Huarochir,
Agua fresca y prístina de manzana Che,
Brotas incansable calmando sed,
Riegas tierras, consuelas almas,
Orgullo de mi madre

Discurrir de mi Huarochir,
Dulce y triste como el vivir;
Dulce por que me diste la luz,
Triste por ya veo tu atardecer

Huarochir querido; tierra
Donde nacieron mis padres,
De tus calles empedradas
Aprendí el trabajo,
De tu belleza la sencillez;
De tu cielo, la honradez, de
Tu clima la verdad y de tus
Canciones, el amor.
S.23-07-07 CLAG

COSECHA DE PAPAS PICADA DE LEÑA EN HUAROCHIRI

LA COSECHA DE PAPAS si algo quedó marcado para siempre como un grato recuerdo en mi vida es la cosecha de papas que solíamos realizar en los meses de marzo, abril a veces con lluvia o sin ella nuestra chacra es grande en manzanache pampa yauyina le había puesto mi abuelita Lucía Tello Macavilca a quien no conocí pues ella murió mucho antes de que yo viniera al mundo, a la cosecha convocaba mi mamá a todos los parientes, tíos, tías, primos haciendo apuestas por cada cepa de que color sería la papa a saca, un barretao y afloraba cantidad de papas hermosas de todos los tamaños luego a escarbar, después de sacudir la cepa, en abundancia papas sanas de sabor exquisito las comíamos sancochadas en pachamanca o en huatia, con un sabroso y fresco quesillo que daba las vacas que andaban por el mismo terreno, o con un agradable y riquísimo aji molido con huacatay arrancado de la misma naturaleza, igual procedimiento para cosechas las ocas el olluco o la mashgua que época tan sana, no conocíamos las plagas ni los pesticidas todo al natural, la lluvia a veces nos detenía, nos refugiábamos en la casita o en las cuevitas hasta que pase o desaparezca, nos protegíamos a veces con el costal de cargar las papas cruzadas formando una gorra que terminaba como túnica que cubría la espalda se mojaba tanto que pesaba. Pero luego venía el cargado de las papas a casa, alquilábamos mínimo 10 asnos y armábamos las cargas, los cargábamos a los asnos y camino a Huarochirí con o sin lluvia en el camino muchas veces los cargueros se ladeaban o colgaban a la vez en dos o tres asnos, arreglaba cada carga que se venía al suelo los asnos eran mansitos y soportaban tal incomodidad estoicamente todo era de bajada, si había lluvia las piolas se endurecían y era mas difícil todo igual había que darle al trabajo yo tenía 14 años y muchos años cargué papas también leña con la misma modalidad, en casa teníamos papas como quien tiene piedras llegaba a la altura de la mitad del cuarto principal no había lugar para pasar, les hacíamos un caminito para transitar, algunas veces perdimos a algunos asnos uno que no se dejaba cargar esquivó tanto las cargas haciéndose a un lado justo cuando le echaba la carga nadie se percató entre neblinas y lluvias que estábamos al borde de la quebrada y el pobre asno rodó hasta perder la vida la quebrada era profunda y accidentada, otro asno comió la mishgua mientras cargábamos a sus compañeros, la misshgua es veneno para el asno, murió el pobre animal arrojando espuma por el hocico una pena y una deuda con el dueño.
Luego vendría la separación de los tubérculos en casa se contrataba señoras especialmente para separar las papas, las grandes eran para consumo inmediato y para cambiar con maíz cebada trigo. Las medianas era para guardarlas en chacanazas especialmente acondicionadas con hojas de eucalipto, muña, yerba buena, era la próxima semilla para la nueva siembra y las menudas se cocinaban en peroles inmensos luego a pelar, para hacerla secar en el techo de calamina a base del naciente y esplendoroso sol Huarochirano era la papa seca que luego a moler en el batán de piedra lista para la carapulca hecha en ollas de barro y con fuego de leña y con el sabor inconfundible que nunca volverá.












Jornada similar con su respectiva diferencia era con la picada de leña y su traslado de la chacra a Huarochir, otra vez los asnos, las sogas, el amarre de cada carga de leña que tiene sus habilidades y sus secretos.
En la cosecha de papas se solía jugar a la misa que consiste en que la persona que encuentra en su escarba de las papa la mas grande se la arroja a quien esta descuidado cobrándose la revancha en cualquier momento y buscando encontrar la papa mas grande para devolver y así el trabajo de la cosecha se hace mas alegre y dinámica no falta el brindis por éxito de la cosecha, la familia y los que ayudan a la cosecha se llevan su saquito de papas, es que hay abundancia de lo que hoy solo se cultiva para consumo familiar por los altos costos que representa antes no. La calidad y la abundancia iban de la mano mi madre sonreía de alegría y satisfacción cosechar tanta papa cada año era así. Para la época de la cosecha toda la familia se daba la mano .tiempo inolvidable que no volverán.

martes, 10 de agosto de 2010

MARTIN AGUIRRE MACAVILCA EN EGIPTO







13 DE AGOSTO DIA INTERNACIONAL DEL ORGULLO ZURDO

El 13 de agosto es el día internacional del zurdo, de las personas que usan a la perfección la mano o el pie zurdo o son zurdos de pie y de mano, es el día 13 de agosto para recordarle al mundo en su mayoría diestro, que la izquierda tambien existe en un mundo diseñado solamente para diestros pero la cosa esta cambienado.
La mayoría de objetos estan diseñados para diestros, sin tener en cuenta que los zurdos constituyen ya un 25% de la población mundial, además en el futbol y otros deportes resulta dificil controlar a un zurdo, siendo diestro su rival deportivo.
Además los zurdos son creativos, hábiles en el deporte, inteligentes como cualquier diestro, por deducciones de familias zurdas, hijos o nietos zurdos de manera inevitable lo digo por experiencia de mis tres hijos varones uno es zurdo de donde le viene lo zurdo de sus abuelitos, es mas mi pequeña nietecita apunta a ser zurda todo lo recibe con la zurda.
Tener en casa un zurdo es sinónimo de orgullo, si su niño o niña lo es, alégrese pocos tienen la dicha de contar con éstos seres, que marcan la difererencia.
Finalmente personajes de talla mundial fueron zurdos Leonardo Da Vincce,Jhoan Sebastián Bachi, Rafael Nadal Matt Gooeing. y tantos famosos deportistas.